Hermosillo, Son. 10 de junio de 2010.- Diputados de las Comisiones de Salud y de Justicia y Derechos Humanos acordaron trabajar en una reforma al Código Penal para que se equipare el concepto de “muerte cerebral” con el de la Ley General de Salud y con ello sea más factible entender la donación y el trasplante de órganos como una opción para prolongar la vida humana.
El diputado Marco Antonio Ramírez Wakamatzu, presidente de la Comisión de Salud, expresó el compromiso de la actual legislatura por definir un marco jurídico que empate la Ley de Salud con el Código Penal, que permita avanzar en el proceso de trasplantes, y en forma paralela, fortalecer la cultura de la salud que previene obesidad infantil o diabetes.
A la reunión se invitó a Guillermo Rodríguez Carrizosa, director del Centro de Trasplantes en el Estado quien sostuvo que el trasplante es la solución más digna y económica para sacar adelante a pacientes con diferentes padecimientos.
Informó que en Sonora actualmente existen 196 enfermos que requieren de trasplantes diversos, en el caso de
diabetes y obesidad que generan insuficiencia renal crónica con un altísimo costo y una tasa de mortalidad del 75% entre el tercer y quinto año.
El trasplante significa 65% de ahorro en el costo de tratamiento a pacientes que requieren diálisis, destacó, al exponer a los legisladores la importancia de avanzar en esta reforma para que los trasplantes se realicen con legalidad en hospitales, fomente la cultura de donación y se capacite a personal hospitalario así como a agentes del Ministerio Público en este tema.
La Diputada Leslie Pantoja Hernández habló de la necesidad de otorgar certeza jurídica al proceso de trasplantes y cultura de donación, por lo que es necesario continuar el análisis de esta iniciativa y reuniones con especialistas en la materia, para definir en breve el dictamen y votarlo.
En este sentido, el legislador Damián Zepeda Vidales, presidente de la Comisión de Justicia y Derechos Humanos, dijo es un tema prioritario para la salud de los sonorenses, que implica un amplio análisis de aspectos clínicos, económicos y de educación que deben ser