Hermosillo, Son. 28 de junio de 2016.- El fin social de apoyar a estudiantes de bajos recursos, sin importar el promedio de calificaciones que obtengan de sus estudios de Primaria y Secundaria, quedó establecido en la Ley que Regula el Otorgamiento de Becas y Estímulos Educativos del Estado de Sonora, al aprobar el Congreso del Estado el Decreto que reforma diversas disposiciones de dicha normatividad.
Con estas reformas, los diputados de la LXI Legislatura estuvieron de acuerdo en la necesidad de facilitar el acceso a la obtención de una beca, a todos aquellos estudiantes que están más ocupados en subsistir en condiciones dignas con su familia, que en estudiar.
La Comisión de Educación y Cultura dictaminó con base a la iniciativa que en diciembre de 2015 presentó ante esta Soberanía el diputado Omar Alberto Guillén Partida, quien entonces se dijo convencido de que una de las razones que causan altos índices de deserción escolar es la falta de recursos económicos en las familias.
“Esto desemboca en una alimentación deficiente y ésta, a su vez, en un bajo rendimiento académico, lo que finalmente representa un impedimento, de acuerdo con la Ley vigente, para que nuestros niños puedan acceder a una beca”, aseveró.
De acuerdo al dictamen que leyó Guillén Partida, la Comisión de Educación y Cultura consideró que, para lograr exitosamente los nobles propósitos de la iniciativa, era necesario hacer importantes previsiones adicionales a las que contiene la propuesta en estudio.
El fin es que dichos recursos, efectivamente beneficien a estudiantes que realmente lo necesitan, pero una manera enfocada, para dar prioridad a quienes tengan más necesidad, destaca el documento.
La comisión consideró a alumnos que no sólo pertenecen a familias de escasos recursos, sino que también habitan en comunidades marginadas, como es el caso de las etnias sonorenses, lo que ensancha aún más el abismo entre el estudio y su manutención, además de estudiantes que pertenecen a grupos vulnerables.
El Decreto reforma los artículos 25, fracción I y el párrafo segundo; 31 y 32 de la Ley que Regula el Otorgamiento de Becas y Estímulos Educativos del Estado de Sonora.
Recibirán el beneficio los alumnos inscritos en instituciones educativas oficiales que cuentan con promedio sobresaliente; los de escuelas particulares que cuenten con un promedio igual o superior a 9; los de educación media superior y superior de instituciones educativas públicas y particulares que cuenten con un promedio de 8.5 o superior y que sean alumnos regulares.
Los alumnos de escuelas públicas
de educación primaria y secundaria que tengan alguna discapacidad, los que habitan en comunidades indígenas, en zonas rurales o urbanas marginadas en condiciones de pobreza extrema; los hijos de madres jefas de familia, los hijos de padres que tengan alguna discapacidad, los hijos de padre que aporte el único sustento económico de la familia, y los hijos de padres desempleados y/o jubilados que cuenten con promedio aprobatorio y sin materias reprobadas.
Además de los estudiantes de instituciones públicas de educación superior que sean regulares, no debiendo adeudar asignaturas de ciclos escolares anteriores y cursar las materias de acuerdo con el plan de estudios correspondiente. Quedarán exentos de este requisito los inscritos en el Registro Nacional de Víctimas, inscritos en el primer y segundo año de su plan de estudios y provengan de un hogar cuyo ingreso sea igual o menor a cuatro salarios mínimos per cápita mensuales.
En esta sesión ordinaria, el Pleno aprobó por unanimidad el proyecto de Ley para la Protección, Conservación y Fomento del Árbol en las zonas urbanas del Estado de Sonora, la cual tiene por objeto garantizar a la población urbana de la entidad, la protección de su derecho a un medio ambiente sano para el desarrollo de sus actividades y la mejora de su calidad de vida.
El diputado José Armando Gutiérrez Jiménez, quien el pasado 5 de mayo presentó la propuesta, dio lectura al proyecto, del que destaca la importancia de que los municipios del Estado puedan enfrentar los efectos del cambio climático mediante una política que asegure la educación ambiental, conservación, mantenimiento, protección, restitución, fomento y desarrollo de los árboles urbanos dentro del Estado de Sonora.
La Comisión de Energía, Medio Ambiente y Cambio Climático dictaminó dicha propuesta, la que consideró acorde al contexto nacional e internacional, porque contribuye a la protección al medio ambiente, por representar el cuidado de los árboles beneficios sociales, ambientales y económicos.
“No sólo (aprueba) por los motivos antes expuestos, sino que también porque se establecen mecanismos jurídicos tendientes a verificar y sancionar a todas aquellas personas que, de manera injustificada, poden o derriben un árbol ubicado dentro de espacios públicos, como plazas, parques, banquetas, o en inmuebles privados”, establece el dictamen.
Con este tipo de acciones, los municipios, a través de la dependencia competente, garantizan el respeto al derecho a un medio ambiente sano y en el ejercicio de la potestad sancionadora que les otorga la Ley, por lo que se